Una comunidad de propietarios es una entidad sin personalidad jurídica propia pero que sí tiene un patrimonio propio (los elementos comunes del edificio) y puede ser responsable ante otras personas de daños que se originen en dichos espacios comunes.
Comunidad de propietarios
La comunidad propietarios está compuesta por las viviendas que son, cada una de ellas, propiedad de sus vecinos y tiene, como hemos dicho, las zonas comunes que son propiedad de todos los propietarios de esas viviendas en el porcentaje que se le atribuya a cada uno.
Quién responde ante un daño
Si se produce un daño en esas zonas comunes debe responder la comunidad de propietarios, lo que significa que deben responder los dueños de las viviendas, cada uno según su porcentaje de participación. Es decir, si hay que responder por daños se va a terminar cobrando una derrama a los vecinos para poder obtener el dinero necesario.
Qué cubre un seguro de vivienda
Aunque el propietario de un piso tenga un seguro de su vivienda, éste cubre los riesgos de dicha vivienda, pero normalmente no cubre su porcentaje de responsabilidad en los elementos comunes. A parte de la responsabilidad civil, también debemos valorar los típicos siniestros de daños por agua (u otras coberturas) en zonas comunes. Es decir, que si en un portal se rompe una tubería general de la comunidad, ningún seguro de hogar se hará cargo de su reparación (ni de indemnizar los daños provocados).
Por qué es recomendable un seguro de comunidad de propietarios
Como acabamos de explicar, es muy recomendable contratar un seguro de la comunidad de propietarios, además de que en algunos casos es obligatorio: puede que los estatutos de la comunidad establezcan que debe contratarse y, además, existen algunas comunidades autónomas que, en su normativa, exigen dicho seguro (como en Madrid o la Comunidad Valenciana).
Las posibles responsabilidades que va a prevenir un seguro son:
- Responsabilidad civil si alguien o algo sufre daños en los elementos comunes existiendo alguna causa imputable a la comunidad, como si alguien se resbala en la escalera cuando está mojada.
- Daños por agua cuando hay roturas o escapes que hay que arreglar y que, además, pueden producir un daño en las viviendas particulares a las que habrá que indemnizar.
- Incendios aunque un incendio comience en una de las viviendas puede afectar a los elementos comunes y producir daños por el propio fuego o por humo que habrá que reparar.
- Rotura de elementos como cristales, espejos, mobiliario de las zonas comunes.
- Robo de elementos comunes. Además de todo esto puede haber otras coberturas como la de asistencia jurídica o cualquier otra similar a la de un seguro de vivienda normal.